Faltaba poco para el desgraciado concilio, que lo destruiría todo.Nadie hubiera imaginado en esos tiempos, un Papa, hincando la rodilla en una mezquita, firmando un documento con budistas, hindues, etc que son simples shows políticos.Es para ponerse a llorar, o separarse de Roma.Gracias por este maravilloso documento.
Faltaba poco para el desgraciado concilio, que lo destruiría todo.Nadie hubiera imaginado en esos tiempos, un Papa, hincando la rodilla en una mezquita, firmando un documento con budistas, hindues, etc que son simples shows políticos.Es para ponerse a llorar, o separarse de Roma.Gracias por este maravilloso documento.
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