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martes, 1 de octubre de 2013

¿Por qué quiso Dios tener Madre?




Considera cómo, habiendo determinado Dios de hacerse hombre, aunque hubiera podido tomar cuerpo de varón perfecto como el de Adán, no quiso sino nacer de mujer  y tener Madre como los demás hombres.

Quería la divina Bondad, tan amiga de comunicarse a sus criaturas, honrar los dos sexos de la humana naturaleza, levantando un varón a la infinita dignidad de Hijo natural de Dios, y una mujer a la dignidad de Madre de Dios, que también en algún modo es infinita. Además, como nuestra perdición comenzó por un hombre y una mujer, así quiso que nuestra redención tuviese principio de otro hombre y de otra mujer. La cual, siendo Madre del Redentor, fuese también Madre y abogada de los pecadores, a la cual acudiesen confiadamente los que, temerosos de su justicia, no osasen acudir a Él.

Considera luego cómo la Santísima Trinidad, entre innumerables mujeres que vio en su eternidad, puso los ojos graciosamente en la Virgen, la escogió para ser Madre del Verbo encarnado y su cooperadora en la redención del mundo, Madre y abogada de los hombres, y a quien el mismo Dios en cuanto hombre se sujetase y obedeciese. Esta elección, como dicen los santos Padres, fue la raíz de las otras grandezas de esta Señora; y de ello tuvo siempre grande estima y agradecimiento, viendo que había  sido de pura gracia y sin merecimientos suyos; porque como Dios la escogió para ser Madre suya, pudiera escoger a otras muchas mujeres , y hacer tales como a Ella.


Pero tú has de gozarte de que le cupiese esta buena suerte, y darla el parabién de ella, diciéndola: ¡Oh Virgen Santísima! Gózome de que hayáis sido escogida para dignidad tan soberana como es ser Madre del mismo de quien sois hija. Y pues con esta dignidad os dan también ser Madre y abogada de los pecadores, mostraos ser Madre nuestra en favorecernos, y abogad por nosotros, para que seamos dignos hijos de quien Vos sois Madre.

(tomado de las meditaciones del Padre Luis de la Puente)

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