viernes, 16 de abril de 2021

¡Nuestro blog cumple diez años! ¡Laus Deo!

 

En un día como hoy, 16 de abril de 2011, nació este blog.

 

Han sido diez años de mucho aprendizaje, lectura, escritura y sobre todo de entrar en contacto con gente valiosa de todas partes del mundo que comparten con el autor de este blog la nostalgia por una herencia de pensamiento que yace olvidada por unos, pisoteada por otros e ignorada por casi todos.


Fue gracias al aliento que nos dio un sacerdote amigo por lo que decidimos emprender este viaje, y no nos hemos arrepentido ni un instante. El aprendizaje ha sido permanente y continuo, hemos ido viendo más claro algunas cosas que al principio estaban como envueltas en un velo de complejidad; complejidad que lejos de desanimarnos nos impulsaba a continuar avanzando hacia la comprensión, que nos parecía posible y cercana, de la mano de santo Tomás de Aquino.


Diez años después debemos reconocer con humildad que el camino del tomismo recién está comenzando, porque si bien es cierto que algunas cosas las entendemos hoy mejor que ayer, hay otras, las más fundamentales (Ser y esencia, por poner solo un ejemplo), que el tiempo nos ha mostrado que las entendíamos mal o de forma muy superficial, y somos conscientes de que se necesitará mucha reflexión y lecturas meditadas, y oración, para llegar algún día a su comprensión relativamente cabal, Deo volente.


El agradecimiento hacia santo Tomás es inmenso, pienso que si quitara a santo Tomás de mis últimos quince años de vida, esta sufriría un cambio dramático y quedaría irreconocible, supongo que para peor. Porque santo Tomás ha sido, entre otras muchas cosas, un muro protector que me ha permitido como persona permanecer lejos de los dardos venenosos de las corrientes modernas de pensamiento, llenándome de razones y permitiéndome ver las cosas desde una altura que me ha facilitado la realización de una crítica argumentada, y una toma de postura consecuente. Mientras a mi alrededor veo a muchos naufragar en medio de las ideologías más destructivas, el tomismo me ha mantenido a flote, y me aferro a él como el náufrago a la tabla que la Providencia pone en su camino.


Hoy, esa soledad que sentíamos hace diez años al ver que éramos una rara avis en el mundo digital, se ha ido desvaneciendo poco a poco y hay señales esperanzadoras en este sentido: cada día aparecen más y más iniciativas en Internet encaminadas a difundir en pensamiento de santo Tomás de Aquino, cosa que celebro profundamente. Sueño con que un día todas esas iniciativas, que hoy se encuentran dispersas en páginas de YouTube, blogs, cursos online, etc., se unan en una sola familia y se pueda ofrecer una sólida propuesta de difusión y defensa del tomismo, no como curiosidad histórica, sino como herramienta viva y perenne para el hombre y la sociedad de nuestro tiempo. Dios dirá.


Mientras lo anterior ocurre, y aunque la Providencia dictaminara que no ocurra, este blog y el canal de YouTube que de él nació, intentarán seguir la tarea iniciada hace diez años: difundir la vida, obra y pensamiento de santo Tomás de Aquino, plenamente persuadidos de que solo en las fuentes del aquinate se encuentra la doctrina saludable para la dirección de la inteligencia, de la voluntad, y por ende, de las sociedades humanas.

¡Pedimos a Dios que continúe bendiciendo esta minúscula empresa, la cual ponemos bajo el patronazgo de la santísima Virgen María!

 

¡Feliz aniversario!

 

Leonardo Rodríguez  


2 comentarios:

FERNANDO JOSE ARES dijo...

Gracias por este valioso oasis en el postmodernismo.
Y gracias Dios, por habelo puesto en mi conocimiento.
Lo leo anonadadamente y gran fulgor. A veces es más problemático que otro por los menesteres de la vida cotidiana, pero nunca se sienta solo cada vez que publica algo.
Yo, al menos, estoy allí...
Gracias totales!!

Quidam dijo...

Es usted demasiado amable, trataremos de seguir con el favor de Dios. No siempre es fácil sacar el tiempo para alimentar el blog y el canal de YouTube, confiamos en la paciencia de los visitantes cuando vean que demora en publicarse algo nuevo.

Feliz día.

Laus Deo.